Los motoristas de élite no tenían muchas cuestiones que plantearse al comienzo de la especial del día. Con el orden de salida invertido en la categoría Rally GP para la crono de 48 horas que empieza mañana por la mañana, la máxima ventaja la obtiene el último que tome la salida, de los 17 pilotos que siguen en la categoría. En este contexto, la estrategia de Adrien Van Beveren parecía bien calculada. Con una interesante 5ª posición en el km 0 y un talento para navegar por las dunas podía marcarse como objetivo la medalla del día. El plan le salió casi perfecto al francés, aunque al final le adelantó en la meta su compañero de equipo en el Monster Energy Honda, Pablo Quintanilla, por 37 segundos. El chileno gana su octava etapa en el Dakar y hereda el mejor puesto de la 6A. En su duodécima participación en el Dakar, prueba en la que ha terminado 2º en dos ocasiones (2020 y 22), «Quintafondo», 6º esta tarde a 26’47», tiene quizás una gran baza su favor. Sin embargo, tendrá que usarla bien, si quiere destronar a Ross Branch del puesto de líder y afirmar su autoridad entre los pilotos de Honda. Otros tres codician también el trono del botsuano: Cornejo (2º a 1’14»), Brabec (3º a 3’47») y Van Beveren (4º a 18’10»).